Poco se va a lograr sólo criticando a autoridades y medios de comunicación por su desinterés en distribuir información. Sólo con el esfuerzo de todos, manteniendo viva la Memoria durante todo el año, sin caer en la tentación de recordar los 24 de marzo porque "queda bien" y, sobre todo, hablando en los "nuevos idiomas" (redes sociales, correles, mensajeros instantáneos, bitácoras) es que se podrá revertir esta situación y no sólo brindar datos sino también transmitir una sensibilidad.
¿Acaso, si tu hermano habla en español, vas a intentar explicarle en marciano por qué es bueno ser generoso o por qué la Tierra gira alrededor del Sol? Todos los conocimientos y los valores relativos a esta fecha (que exceden todo período histórico) sólo pueden mantenerse vivos si las formas de transmitirlos se adaptan a los tiempos que corren.